jueves, junio 15, 2006

FEMINA EX MACHINA



DOCUMENTO HISTÓRICO:
CONTRATO DE MAESTRA EN 1923


Este es un acuerdo entre la señorita..................................maestra, y el Consejo de Educación de la Escuela......................................por la cual la señorita.....................................acuerda impartir clases durante un período de ocho meses a partir del...........................de septiembre de 1923. El Consejo de Educación acuerda pagar a la señorita............................ la cantidad de (*75) mensuales
.
La señorita......................................................acuerda:
1.- No casarse. Este contrato queda automáticamente anulado y sin efecto si la maestra se casa.

2.- No andar en compañía de hombres.


3.- Estar en su casa entre las 8:00 de la tarde y las 6:00 de la mañana a menos que sea para atender función escolar.

4.- No pasearse por heladerías del centro de la ciudad.

5.- No abandonar la ciudad bajo ningún concepto sin permiso del presidente del Consejo de Delegados.

6.- No fumar cigarrillos. Este contrato quedará automáticamente anulado y sin efecto si se encontrara a la maestra fumando.

7.- No beber cerveza, vino ni whisky. Este contrato quedará automáticamente anulado y sin efecto si se encuentra a la maestra bebiendo cerveza, vino y whisky.

8.- No viajar en coche o automóvil con ningún hombre excepto su hermano o su padre.

9.- No vestir ropas de colores brillantes.

10.- No teñirse el pelo.

11.- Usar al menos 2 enaguas.

12.- No usar vestidos que queden a más de cinco centimetros por encima de los tobillos.

13.- Mantener limpia el aula: Barrer el suelo al menos una vez al día. Fregar el suelo del aula al menos una vez por semana con agua caliente. Limpiar la pizarra al menos una vez al día.
Encender el fuego a las 7:00, de modo que la habitación esté caliente a las 8:00 cuando lleguen los niños.

14.- No usar polvos faciales, no maquillarse ni pintarse los labios.

12 comentarios:

Anónimo dijo...

uuuhhh.......tan depredadores en el vídeo como en el contrato ...qué bueno. Un siglo entre ellos. Es bueno el tema.

Pilar M Clares dijo...

El vídeo es buenísimo. Lo presentaron en Sitges, en el año 2000,Simona Levi y
Dominique Grandmougin
La propia Simna es una de las actrices. Judith Saula otra. Fue premio especial de la crítica.
El contrato, sin comentarios. Me gustaría encontrar alguno de maestros, a ver sus condiciones. Espanto para todos en la época, más para la mujer como siempre.
Un beso
(si alguien sabe de quién es la música que lo diga; me gusta)

Anónimo dijo...

ahahhahahah.......

Anónimo dijo...

Wenas. Como estoy TERRIBLEMENTE ABURRIDO de estudiar temas oposicionales, te envío esta portada de tebeo de los años 50, para que te des cuenta de que la "violencia de género" no es cosa de hoy en día. El enlace es: http://www.samuelsdesign.com/comics/pages/crime-horror/crime_suspenstories22.htm
Por cierto, como ilustración es COJONUDA, además de ser debatida durante un juicio...pero eso es un historia que ya te contaré un día...

Pilar M Clares dijo...

...desde luego que no viene la violencia de génro de los cinduenta...y el debate me lo imagino también, es salvaje...la pena es que lleve a un asunto real terrriblemente dramático.
Ánimo con esas opos, que son tuyas.

Anónimo dijo...

Que fuerte lo del contrato!! Como es posible que nos intentemos fastidiar la vida los unos a los otros de esta manera, además siempre prohibiendo el placer, lo satisfactorio, lo que te provoca una sonrisa...
Ahora se hace de otra forma pero hay gente que lo sigue intentando.
Un beso

Anónimo dijo...

Y los docentes de hoy se quejan...
Tremendo el vídeo.

Una vez más te felicito.

Besos orgiásticos.

Pilar M Clares dijo...

Hola, Petullia y Ella, gracias por las opiniones. Me interesa mucho esa apreciación que haces, Petullia sobre hoy, sría interesante recoger situaciones en que se sigue intentando, por ejemplo, cuando el estado civil, recien casada, por ejemplo, interviene en que te contraten o no ante la previsión de que tengas un hijo. Este asunto sigue estando presente sobre todo en la empresa privada. Y muchos más. Podríamos ir apuntando cuáles sabemos que se dan. Besos.

Anónimo dijo...

Según tengo entendido, bastante era ese contrato y que pudiese trabajar una mujer. Cierto es que hoy por hoy nos suena muy drástico y restrictivo, pero seguro que la señorita en cuestión era muy feliz con dicho contrato (sin mencionar el morbo que pudiera darle quebrantar alguna de las normas sin que nadie lo supiese)

A día de hoy puede que alguien se metiese ese contrato por donde no llega el sol.

Pilar M Clares dijo...

26 años es ser joven --estaremos de acuerdo--, y obviamente quiere decir que quien los tiene nació en el año 80.
Pues bien, si naciste en ese año, debes saber que fue entonces, no sé exactamente en qué mes, cuando se abolió la autoridad marital, es decir, la dependencia adminsitrativa, económica, social de la mujer al marido. Es decir, que si se quería alquilar una casa o pedir un préstamo, por ejemplo, tenía que estar de acuerdo tu marido.
El franquismo convertía a las jóvenes en niñas inconscientes, y no precisamente como piropo.

Y este es un detalle...¡importante!
Hay muchísimos más que iremos sacando para no olvidar la historia.

Anónimo dijo...

Fuera morbos o satisfacciones a las miserias de la época, la discriminación prima en el tratamiento de la mujer; luego, la república haría una de las normativas más novedosas al respecto para mujers --a pesar incluso de feministas como Victoria Kent, que nunca lo pagará suficiente mente-- cuando defendió en las cortes que sería arriesgado que votasen (en Francia aún no lo hacían, por ejemplo) por su escasa formación. El aniñamiento de la posición de la mujer no sólo ha sido cosa del franquismo, viene de mucho más atrás, incluso de feministas sesudas, que también meten la pata. (Ahora vetan la voz a las prostitutas en el caso de las abolicionistas ¿se están equivocando? ¿es equiparable?)

Pilar M Clares dijo...

El País, 19-6-2006:

"La igualdad no es sólo un derecho humano, es también una ventaja económica". El ministro para la Igualdad de Suecia, Jens Orback, decía en voz alta la semana pasada algo de lo que muchos países europeos empiezan a darse cuenta: que las arcas del Estado se resienten, y mucho, de que la igualdad entre hombre y mujer (más allá de su formulación legal) diste de ser una realidad. En su opinión, las economías de las sociedades más igualitarias crecen más.
(...)
El Gobierno sueco defiende la igualdad por sus ventajas competitivas y cree que excluir a la mitad de la población de un rendimiento laboral pleno es muy poco rentable. En Suecia, los trabajadores tienen derecho a una jornada reducida en un 25%, hasta que el hijo menor cumpla ocho años. Se calcula que hasta un 40% de las madres se acogen a esta posibilidad, lo que ha permitido una incorporación masiva de las suecas al mercado de trabajo desde los años setenta.

---La noticia, por otro lado, estima el gasto en servicios sanitarios y sociales en el maltrato, cosa que me parece el paroxismo del cinismo, aunque sea necesario que se estudie. Recurrir a la economía para convencer a una sociedad de que la mitad de su población merece las mismas oportunidades y reconocimientos es hablar de decadencia y necedad, aunque sea necesario---.