viernes, junio 09, 2006

LA PRIMERA MUJER PERIODISTA: BEATRIZ CIENFUEGOS

Se considera a Beatriz Cienfuegos la primera mujer periodista española desde que publicara entre 1763 y 1764 La Pensadora gaditana, periódico semanal crítico sobre las costumbres masculinas y femeninas y otros temas de interés en la época. En total se publicaron 52Pensamientos, con los que la autora se apuntaba al costumbrismo social iniciado con el periódico inglés The Spectator, del que eran frecuentes las traducciones difundidas por Europa.

Se trataba de un periodismo reflexivo y revisionista, más literario que noticioso y sometido a unas precarias vías de comunicación por lo que la inmediatez no contaba como factor de importancia. A un siglo escaso del inicio del periodismo con las Gacetas, la burguesía ilustrada del XVIII contó con los avances técnicos y los medios económicos suficientes para satisfacer a un público con deseos de leer sus propios ideales culturales y políticos. Mientras tanto, el pueblo, mayoritariamente analfabeto, sólo tenía acceso a almanaques y pronósticos.

En ocasiones se ha dudado de la identidad que se esconde tras la firma de Beatriz Cienfuegos, incluso de su condición de mujer. Tanto en Inglaterra como en Francia hay constancia de una prensa escrita por mujeres que se dedicaba a la crítica social, por lo tanto no tendría que resultar extraño que fuese realmente una mujer, como asegura la última revisión sobre el tema.

Cinta Canterla, de la Universidad de Cádiz, ha estudiado ampliamente esta cuestión y publicado una edición antológica del periódico en la que hace ver que la legislación de la época prohibía publicar libros o papeles con nombre falso, y la publicación contaba con licencia de impresión.

Beatriz Cienfuegos fue sin duda una mujer peculiar , independiente y culta, que supo aprovechar la reorganización de Carlos III sobre tasaciones, precios de publicaciones e inquisición para favorecer el mundo editorial. Después, el fantasma de la revolución francesa traería con su sucersor, Carlos IV, las más estrictas prohibiciones.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

¿y el primer hombre que se comió un coco? Vale, es broma.

Anónimo dijo...

jajajaja ¿No sería tu abuelo, mister anónimo?

Anónimo dijo...

A mí me gustaría fichar a Beatriz Cienfuegos en cualquier medio. Todos están faltos de revisión y de contexto; la inmediatez les pierde

Pilar M Clares dijo...

Totalmente de acuerdo contigo, Lucía, no sólo pierde a los medios, nos pierde a todos.
La inmediatez se ha convertido en enemiga de los seres que desde que nacen corren y ven correr. En la información, un elemento de deformación tanto del que la hace como del que la recibe. Desde la misma universidad se evalúa con el factor tiempo como determinante en los estudios de Periodismo; la adecuación se antepone a la formación. Será práctico, seguramente, este adiestramiento; parece poco constructivo. Mientras, se habla de sostenibilidad de energías, ahora ya publicitada, convertida en imaginario (¿a qué sustituirá?), pero entre ellas no se cuenta mucho con la del humano, que ve correr y corre.

Anónimo dijo...

Esa inmediatez y anticipación lleva en muchas ocasiones al disparate: la noticia ya se ha construido antes de que se produzca o cuando se trata de un atentado o un suceso, en el mismo momento ya se apunta al culpable dando idea de una eficacia policial impresionante: tipo James BOnd

Pilar M Clares dijo...

Claro, así se crea la disposición hacia una interpretación unidireccional, mientras otros piensan por nosotros. Es difícil esto de la prensa, porque, por otro lado parece que es lo que requiere el público adiestrado a la misma inmediatez ¿pero es que hay tiempo a ver, interpetar, contar? Tenías razón ¡quién tuviera tiempo como Cienfuegos para reflexionar!

Pilar M Clares dijo...

Hola, cuentolasgotas, te agradezco tus comentarios.
Creo que la escritora que no recuerdas debe ser la mexicana Sor Juana Inés de la Cruz, una intelectual increíble refugiada en los hábitos para poder ser escritora. Octavio Paz le ha dedicado unos estudios interesantes como siempre. Si le echas u ojo a su poesía te sorprenderá.
En cuanto a lo que dices de Larra, sé que tiene páginas bastante agrias sobre la mujer, más fruto de la estética romántica y su propio carácter depresivo que de una reflexión profunda. No eran tiempos de dedicación al tema y él, como buen loco despechado, simplemente siguió la dinámica de la época. Me fascinó el artilugio con que se suicidó y la leyenda de que está en su museo; fue desde pequeña el primer contacto que tuve con la literatura y el periodismo, y es por eso que elegí este nombre. Un nombre, no mucho más.
Saludos.

Pilar M Clares dijo...

Me imagino que sabrás tú más que yo de Sor Juana Inés, El divino Narciso es una obra que creo está en revisión últimamente en las universidades. Me alegro mucho ue seas de literatura, que la estudies en la tesis y que entres por aquí; seguro que tendremos más de un tema común. Un abrazo cuentolasgotas!