Hasta la fecha, en la enseñanza pública española se mantiene la asignatura de Religión Católica en la educación primaria y secundaria -es decir, hasta los 16, máximo 18 años- con carácter opcional, lo que no la priva de ser calificada y tenida en cuenta a la hora de hacer media en el expediente. En contrapartida, la alternativa a ella, que eligen quienes no desean dar religión o profesan otra, no cuenta como calificación, es más, hasta hace no mucho carecía de programa y se solía utilizar, en la actualidad aún, para cuadrar los horarios en asignaturas como filosofía, música, etc. que solo se dan en algunos cursos y, por lo tanto andan escasas de horas.
La religión como asignatura está impartida por sacerdotes o personas acreditadas por los obispados de cada Comunidad Autónoma, que son quienes designan a los profesores, aunque les pague el Estado. Esto hace que no sea raro que dependa de la línea ideológica del obispo el rumbo y perfil del profesor que, si es profesional de la iglesia, jamás será una mujer puesto que por norma se designa a los sacerdotes. Solamente si son seglares o pertenecen a alguna orden específica en los colegios privados-concertados (dependientes económicamente del Estado) podrán ser mujeres.
Un Real Decreto (1631/2006, 29 de diciembre) publicado en el BOE del 5 de enero pasado pretendía darle contenido a las horas vacías alternativas a la religión católica, con los siguientes contenidos:
Para los tres primeros cursos de la Enseñanza Obligatoria (desde los 12 a los 15 años) se programa la llamada Educación para la ciudadanía y los derechos humanos, dividida en cinco bloques: Contenidos comunes (sobre opiniones, argumentaciones propias y ajenas, críticas de informaciones en los medios, etc.) Relaciones interpersonales y participación (autonomía personal, igualdad, actitudes no violentas, entre otros) Deberes y derechos de los ciudadanos (derechos humanos, internacionales, diversidad…) Ciudadanía en el mundo global, Sociedades democráticas del siglo XXI y, por último, Igualdad entre hombres y mujeres.
La religión como asignatura está impartida por sacerdotes o personas acreditadas por los obispados de cada Comunidad Autónoma, que son quienes designan a los profesores, aunque les pague el Estado. Esto hace que no sea raro que dependa de la línea ideológica del obispo el rumbo y perfil del profesor que, si es profesional de la iglesia, jamás será una mujer puesto que por norma se designa a los sacerdotes. Solamente si son seglares o pertenecen a alguna orden específica en los colegios privados-concertados (dependientes económicamente del Estado) podrán ser mujeres.
Un Real Decreto (1631/2006, 29 de diciembre) publicado en el BOE del 5 de enero pasado pretendía darle contenido a las horas vacías alternativas a la religión católica, con los siguientes contenidos:
Para los tres primeros cursos de la Enseñanza Obligatoria (desde los 12 a los 15 años) se programa la llamada Educación para la ciudadanía y los derechos humanos, dividida en cinco bloques: Contenidos comunes (sobre opiniones, argumentaciones propias y ajenas, críticas de informaciones en los medios, etc.) Relaciones interpersonales y participación (autonomía personal, igualdad, actitudes no violentas, entre otros) Deberes y derechos de los ciudadanos (derechos humanos, internacionales, diversidad…) Ciudadanía en el mundo global, Sociedades democráticas del siglo XXI y, por último, Igualdad entre hombres y mujeres.
Para 4º, la asignatura pasa a designarse Educación Ético-Cívica y sus contenidos, a groso modo y según el decreto, son: Reconocimiento de sentimientos propios y ajenos, crítica de las informaciones, reconocimiento de injusticias y desigualdades, etc. Sobre identidad y alteridad, sobre los derechos humanos, ética y política, problemas sociales del mundo e igualdad entre hombres y mujeres.
Nada de lo que contiene este decreto insulta a nadie, incluso se observa con incredulidad, pero en todo caso no contraviene ningún derecho constitucional y sí, sin embargo, cumple con el deseo de U E de incluir en los programas educativos la promoción de los derechos y valores democráticos.
La reacción de la oposición política fue inmediata, lo normal dado el lugar que ocupan y la línea de actuaciones que vienen desarrollando desde que perdieran las elecciones en 2004. Por supuesto que han prestado todo el apoyo, y prestan, al escándalo social y luego mediático que los sectores más reaccionarios han puesto en marcha, algunos intelectuales incluidos, especialmente la Iglesia , de la que aún no se termina de entender qué ve de pernicioso en la asignatura. Si se evalúa ¿perderían público y por tanto profesorado? ¿fieles…? ¿dinero del tanto por ciento que “voluntariamente” cede cada profesor-a de religión a las diócesis?
Las críticas han sido feroces, manifestaciones, protestas, congresos, encuentros y seminarios no han dado tregua desde enero pasado. De nuevo, este año las cosas quedan como estaban. De nuevo asignaturas fantasmas vacías de contenido. Cuando pasen las elecciones ya veremos, pero me temo que oiremos hablar del tema en breve, así que pasen unos días. Mientras tanto, que le pregunten a los alumnos qué quieren estudiar; para ellos siempre, "lo justo", está claro.
¿Qué opinas?
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30 comentarios:
Yo opino que a los escolares deberían enseñarles Pastafarismo porque eso de andarse con catolicismos ya está bien pasado de moda.
A menos, claro, que las colegialas encuentren inspiración en todo ello (los flagelos, los hábitos, las confesiones y las penitencias) para cuando vayan por la tarde a la casa de sus amiguitos colegiales a estudiar los cursos de anatomía y lengua 1, 2, 3, 4 y para de contar que después nos mandan al infierno.
Un besito, Pili, de su nuevo amigo Equinoxe.
pd: qué placer ser el primero, ¡Virgen Santa!
No sabes cómo me alegro de que seas el primero, y pastafari!!!
Por favor, desarrola tu teoría, y que empiece el debate sobre los espaguettis voladores.
"Oh Tallarines que están en los cielos gourmets
Santificada sea tu harina
Venga a nosotros tus nutrientes..."
Pongo el enlace para los escépticosPastafaris, cuerpo teórico
Saludos, equis noche
Opino, y desde hace muchos años, que la asignatura Religión debería ser Historia de las religiones (no creo que nadie con sentido común vaya a negar que eso es un bagaje cultural necesario)sin interpretaciones. Digo que en el colegio de mi pueblo, al parecer, las cosas han funcionado de otro modo porque aquí Ética sí ha servido para evaluar, y tenía entidad real como asignatura. Opino que no me gusta que me digan lo que tengo que pensar y que esta nueva asignatura es un adoctrinamiento. Mis hijos son mi responsabilidad, y es, por tanto, asunto mío, inculcarles los valores y la doctrina que considere oportunos. El colegio, los profesores, deben formarlos académicamente, de su educación ya me ocupo yo. Si quiero inculcarles los valores de la religión católica, es cosa mía, no del colegio. Si quiero inculcarles laicismo, también.
Esto es como volver a la Enciclopedia Álvarez, ya sólo falta que inventen un himno y se lo hagan cantar a los chiquillos como en tiempos de Franco se les hacía cantar el Cara al sol.
No tenemos un sistema educativo de calidad, y, desde luego, esta asignatura está cumpliendo la función de cortina de humo. Hay cosas mucho más importantes que modificar en Educación, antes que sacarse de la manga asignaturas doctrinales como ésta.
Para Equinox: ¿a cuántos católicos de verdad conoces?
Raquel: se llamó ética hace mucho tiempo a la asignatura que sustituyó durante una época a la religión, tenía programa, se evaluaba. Después, en la secundaria, se daba Ética dentro de las asignaturas de los departamentos de Filosofía, es decir, como una parte de esta disciplina, nada tenía que ver con la religión tal y como se da. Y ahora, las cosas en tu pueblo y en el mío, para todos, están de otro modo. La asignatura alternativa a religión sigue siendo no evaluable, sigue siendo hora dispuesta a la voluntad del que le toque darla.
Por otra parte, hablamos de conciencia en sentido filosófico pero luego la aplicamos a comportamientos, como dices, a mí tampoco me gusta que me digan lo que tengo que hacer, ni me gusta ejercer ese poder, menos desde la enseñanza.
Soy laica, me gustaría que la enseñanza lo fuera, y creo que ese tipo de conciencia de la que hablas, religiosa o laica, debería entenderse de verdad. La formación religiosa está en las casas, y en las parroquias, lo que pasa es ques e pierde público, y, desde mi puntod e vista, se recurre a los centros de enseñanza para el adoctrinamiento católico. Hay mucha gente que no lo es. Dime del programa que se propone, y porfa, mira el decreto enlazado, qué es lo que consideras inadecuado. Piensa que si sigue la religión católica en los centros, tieen que haber una alternativa para el resto.
Muchos besos, sabes que me gusta hablar, y no pasa nada por tener posiciones diferentes. Esa es otra... ¿quién nos dijo que eso era imposible?
Como dije al comienzo del comentario, Pilar, me parece incoherente que en un Estado aconfesional o laico como el nuestro, Religión sea una asignatura; no así Historia de las Religione, porque las religiones hane estado y están en la base de muchas culturas y sociedades, y conocerlas me parece importante para el bagaje cultural de nuestros hijos, y para fomentar el respeto por las distintas creencias o por la falta de ellas. Totalemente de acuerdo en que la enseñanza religiosa se dé en casa y en las parroquias, me parece lo más adecuado.
Estoy en la tarea de leeR ese programa, y ese decreto, andaba buscándolo porque sólo he tenido acceso parcial a él, y con lo que he leído no estoy de acuerdo, así que te agradezco el enlace porque me va a facilitar mi propósito. Cuando se trata de cosas importantes, suelo ir directamente a la fuente, no me fío de prensa, ni de partidos, son totalmente parciales.
Me pongo a ello en cuanto pueda, me va a llevar tiempo, ya lo sabes, pero ya veré si una vez terminada la lectura me ratifico en mi primera impresión o cambia mi perspectiva.
Un beso.
Raquel: a unos cuantos.
Pues no da esa impresión, jeje
Raquel: ya lo dicen, querida, "las apariencias engañan".
Peace.
No siempre, :) También se dice que cuando el río suena, agua lleva.
Besos a los dos, vaya por delante:
la cosa de la verdad y la mentira se corresponde, se necesita para existir, pensar en qué son católicos de verdad suena extraño, pero seguramente para ti, Raquel, tiene un sentido.
De católicos, sean de verdad o mentira, estamos rodeados. En Gescartera también, por cierto. No obstante, cada cual vive su, digamos, espiritualidad como quiere o puede, pero lo que está claro es que unanimidad no hay, como en toda la viña. Sin embargo algunos viven como si la hubiera, juzgando a quienes se sitúan al otro lado de la carretera, que exsite como tal porque está en el de enfrente, el otro es otro lado también.
Hay muchos lados desde mi punto de vista, la norma católica, esa que consideraré ahora mentira para quienes viven esa ideología de otro modo, Raquel, creo que ha impuesto juicios, normas por resumir bastante despóticas, poco permisivas con la individualidad, insisto, por resumir.
Pierden parcelas de poder por minutos, digo de poder, no de derecho a creer cada uno lo que quiera, como tú lo tienes, no hace falta que yo lo diga. No obstante, que alguien me justifique la diferencia + y - de dañar o alimentar conciencias por creer en dios o en la igualdad entre hombres y mujeres , por ejemplo (decreto)
Muchos besicos equinoxe, raquel.
Tatatatán tatán!!!
Soy Aquaman!!!
jajjajaja, critopher, por el poder de mi mente...chán! fuego!
Ahí va, blogger me la jugó, dejé un comentario extensísimo esta mañana y no se ha publicado.
Chicos, vamos a tener que darle a blogger un currito, falla más que una escopeta de feria.
Raquel, me dices en un e-mail que se ha perdido el enlñace del Decreto, es verdad, el formato es PDF y quizás ha tenido porblemas. Lo he arreglado, pero por si acaso hay problemas, te dejo aquí la dirección:
http://www.boe.es/boe/dias/2007/01/05/pdfs/A00677-00773.pdf
Te agradezco mucho el interés, es importante estar informados por encima de los medios, ir a las fuentes reales, entiendo tus dudas sobre. Besos
Ya guardé el R.D. para leerlo, Pilar, gracias, :)
El currículo completo ya lo tengo también localizado.
Como te decía, espero sacar luego un poco de tiempo para volver a escribir el comentario que Mr. blogger no quiso publicar esta mañana, :)
Un beso, guapísima.
Mi humilde opinión, siempre desde el punto de vista de madre y/o ciudadana, nunca como técnica/especialista/profesional de algo que no soy y desconozco es, y lamento la extensa introducción, que, evidentemente es responsabilidad de los padres educar a los hijos por encima de la escuela pero, es en la escuela en donde pasan la mayor parte de las horas del día durante 5 de la semana y como tal, también tiene una responsabilidad.
Los valores y la buena educación no es algo que pueda transmitirse unas horas lectivas a la semana solamente, pues es algo que con la actividad diaria, "el tarannà" que se dice por aquí se inculcan progresivamente. De nada sirve hablar de igualdad y respeto si después te envían una carta a casa con información de la escuela dirigida al "padre de familia", algo que recientemente me ha sucedido y aunque puede que no pase de lo anecdótico me molesta enormemente. No ponía "al padre de familia" vamos, que iba dirigida al nombre y apellidos del padre de mi hijo,pero no deja de tener su nota graciosa en parte porque hace más de 1 año que estamos separados y lo sepan o no en la escuela no estaría de más dirigir las cartas a la familia de o directamente con el nombre del alumno.
Lo que quiero decir es que no basta con predicar, hay que dar ejemplo. Quizás esas clases de educación para la ciudadanía son más necesarias de lo que se cree, y no sólo destinadas a los alumnos de primaria y secundaria...
En cuanto la religión en las escuelas públicas estoy totalmente en desacuerdo que se siga impartiendo, pero sí incluiría en el currículum escolar la historia de las religiones.
Un saludo a todos!
Pobres profesores!
Me planteo:
¿Porqué no existe un ministerio dedicado a la "educación ciudadana"?
Un ministerio que se ocupase en concienciarnos de qué está pasando en todos los campos donde nos desarrollamos. De proteger al ciudadano de la publicidad y su nefasta forma de adormecernos. De despertarnos del pasotismo colectivo donde las multinacionales tienden siempre a dirigirnos.
Necesitaríamos que el gobierno dedicase una parte de sus recursos y un ministerio, exclusivamente para protegerle del pensamiento dirigido hacia el que nos empujan constantemente.
Educación ciudadana para todos... o sucumbiremos al “dejarnos llevar”.
Nos están haciendo creer que todo, es para que estemos mejor; para nuestro bienestar, pero todo está dirigido a que no pensemos, a que no reflexionemos, a que no protestemos, a que no analicemos…
El gobierno tendría que trabajar para que nadie pudiera manipularnos, incluido él mismo.
¿Por qué es gratuito el psiquiatra y no el psicólogo?
Bueno, ya veis, así ando muchas veces! jajajajaja !Cuestión!
Un abrazo grandote.
Tercer intento, Pilar, :)
Intentaré ser concisa.
La Iglesia, como cualquier otra organización, tiene unos principios básicos que la definen, en este caso, artículos de fe; son fundamentalmente de carácter religioso. Si no los acatas (no los crees) sencillamente no eres católico del mismo modo que no puedes ser militante de un partido político si no compartes las líneas básicas de su ideología. Para todo lo demás, los católicos pueden hacer uso de su libertad de conciencia. Como cualquier otro grupo humano, ha de estar organizado, existen unas jerarquías, pero la Iglesia somos todos los católicos.
Las relaciones entre esas jerarquías y el resto los miembros de la Iglesia, así como la organización de la misma, son asuntos internos en los que nadie tienen derecho a meterse del mismo modo que nadie tiene derecho a inmiscuirse en los asuntos internos de un partido político, pongo por caso, si no pertenece a él.
La Iglesia, al llamar a sus fieles a la protesta, está manteniéndose dentro del ámbito de los asuntos internos, y los que deciden sumarse a ella hacen uso de su derecho legal a la libertad de expresión, entre otros. Como católica, y al no tratarse de uno de esos principios fundamentales de mi religión a los que aludía, haciendo uso de mi libertad de conciencia puedo sumarme a ella o no, sencillamente.
Cierto que determinada jerarquías eclesiásticas llevan muy mal la pérdida de parcelas de poder, pero esto arranca de atrás, como sabéis.
Creo que cada cual debe mantenerse en su terreno; pondré un ejemplo porque me resulta más fácil explicarlo de este modo: del mismo modo que las autoridades civiles no tienen derecho a inmiscuirse en la ordenación del matrimonio canónico, tampoco ha de inmiscuirse la autoridad eclesiástica en lo que se refiere a la legislación del matrimonio civil. Y yo, como católica, sin contravenir en absoluto los principios básicos de mi fe y en uso de mi libertad de conciencia, puedo votar a favor de una ley de divorcio. Otro asunto es lo que yo haría en caso de plantearme una separación, ya que contraje matrimonio canónico por propia voluntad y con plena consciencia de lo que eso implicaba.
En cuanto a la asignatura, en principio no me gusta porque hablamos de contenidos abstractos y ahí sí hay vía libre a la interpretación. Por supuesto, voy a léerme tanto el R.D. como el currículo y cuando lo haya hecho corroboraré mi primera impresión o cambiaré de idea, eso aún no puedo saberlo.
Parto de la base de que la Educación es asunto familiar. Y de que en el colegio se debe enseñar a pensar, no dar directrices sobre los contenidos de pensamiento. Para conceptos y contenidos abstractos, es impagable la función de la Filosofía, y tampoco estaría de más la asignatura Historia de las Religiones, como apunté en el primer comentario y he podido leer en el de Pi.
De todos modos, insisto en que lo leeré para formarme una opinión más ajustada, yendo directamente a la fuente.
Un beso, guapísima.
de verdad, estoy harta que se le de tanto debate a la historia de la religión , ignorarla , empezar a ignorar lo que dicen una pandilla de mamones que ya en su época intentaron comernos el tarro, que les den , ya está bien, que se saque por fin de la escuela pública, ése es mi único objetivo, fuera. fuera. y fuera.
Bueno, bueno, bueno...he llegado tarde al debate, pero aún así daré mi opinión.
Estoy totalmente a favor de la nueva asignatura y totalmente a favor de la eliminacón de la religión católica de las escuelas públicas. Por el simple hecho de que no tiene sentido, no es ceherente y creo yo, ya basta de incoherencias y canalladas varias.
Para formarse como cristianos tenemos las Iglesias, y creo yo y sin menospreciar, que igual que tenemos los conservatorios para las artes musicales etc, etc...Para la enseñanaza de las religiones, TODAS, adelante con ello, me parecería un acierto total.
En cuanto a lo de la nueva asignatura, estoy de acuerdo con su existencia, y cada día creo que es más necesaria. Estoy de acuerdo en que cada uno educa a sus hijos como quiere...(y que conste que esto, segun qué casos, podría abrir un amplio debate), pero dudo de que su enseñanza esté basada en el adoctrinamiento tendencioso. Miremos un poco a nuestro alrededor, hay familias, porque las hay, que por unas razones o por otras, no dedican tiempo a sus hijos.....y en esto si que no me apetece profundizar hoy.
Y en cuanto a la Iglesia, habiendo dejado claro que tienen sus espacios y parcelas, me parece muy bien que convoque a sus fieles a las mil y una manifestaciones que les apetezca, que se unan al foro de la familia o de la conchinchina; pero un poquito de por favor, sin faltar al 8º madamiento.
Mil biquiños
Uhhh!!!
Hay vacantes para el Pastafarismooo!!!
En lo de la "historia de las religiones", no me refiero exclusivamente a la católica. Y es muy útil, no sólo para saber las incidencias de estas sobre la sociedad a lo largo de la historia; también es una forma de acercamiento y conocimiento, que la ignorancia es muy mala, y mira tú por donde, indagando he estado informándome a cerca del Pastafarismo y creo que voy a echar una solicitud para una de sus vacantes XD
Hola: les escribo para hacer red desde el Blog "La Ciudad de las Diosas" que es una Comunidad virtual de interés para la creación, el intercambio y la difusión del conocimiento con enfoque de género en: Derechos Humanos; Mujer y migración; Mujer y salud; Participación política; Paridad; Medios de Comunicación; Pobreza y; Violencia.
Les invitamos a conocer nuestro trabajo y hacer parte de la red virtual en http://www.laciudaddelasdiosas.blogspot.com
saludos,
Pi, justo eso era lo que yo intentaba expresar y ése es el contenido que pienso debería tener la posible asignatura de tal nombre. Veo que nuestro acuerdo a ese respecto es prácticamente completo. ¿Cómo va tu muñeca? Un beso.
Sobre las creencias y las búsquedas de explicaciones nacen en parte los mitos. Pero las sociedades cambian, y los mitos quedan fosilizados más para entender el pasado que el futuro, Algunos perviven, sí es bien cierto, pero no pueden estar esperando a que llegue la debacle para ser enterrados en su vida activa.
Yo soy laica, no quiero religiones en la enseñanza, estoy con cascadilla y Aloiatotalmente, basta ya de contradicciones, y abogo por lo que ya entiendo como cultura clásica en las referencias que sean necesarias, Raquel, y en las casas, en las parroquias y para quien quiera ir, sin presiones de calificaciones ni alternativas vacias.
Creo que el programa de esa asignatura no es más delicado que el del resto, todo es un punto de vista, y desde luego mucho menos manipulante que la de religión.
Pi, lo vamos a tener reñido pero yo no quiero cargo, soy pastafari de base. ¿Y si nos apuntamos a la ciudad de las diosas? (menos de la fertilidad, por zeus, como dice una amiga mía)
equinoxe!!!! manda urgente instancia
Besoss
La polémica sobre la asignatura obligatoria de Educación para la Ciudadanía no se ha trasladado a las aulas. Apenas acaba de empezar a impartirse y los alumnos, de entre 12 y 15 años, que la estudian ya en algunas comunidades autónomas opinan en esta clase con naturalidad de temas como la orientación sexual (la cuestión que más ha desatado la polémica), la xenofobia, los tipos de familia, la solidaridad o el consumo responsable. Ésta es la realidad -descrita por los profesores, los responsables de centros y los propios alumnos- con la que se ha encontrado EL PAÍS al asistir a la clase de Educación para la Ciudadanía en cuatro centros educativos (tres públicos y uno concertado) de Barcelona, Mérida, Zaragoza y Jaén.
A los alumnos, los temas de Educación para la Ciudadanía les resultan cercanos. La clase suscita el debate y la participación de los escolares, que unánimemente se manifiestan ajenos a la controversia suscitada por la Iglesia católica, organizaciones afines a ella y el PP. Esta materia se enseña este año en las comunidades que han optado por colocarla en 1º o 3º de ESO.
El País digital,25 de septiembre 2007
¡Qué sabrá el Psoe de socialismo!
Bienvenido, empecinado, y ¿de qué hablábamos?
Beso
Pues hablamos de una constitución que dice en su artículo 16.3, que ninguna confesión tendrá carácter estatal. También hablamos de que un partido que proclama en sus siglas que es socialista, se encuentra repleto de ministros, diputados y concejales ansiosos por presidir procesiones, homenajear ridículas banderas y estar cada vez más a gusto con los banqueros, militares y curas. Hablamos también de una vicepresidenta del gobierno haciéndole la pelota al Papa, con visita y misa incluida, de un Bono con la medalla de la virgen de no sé qué leche colgada hasta en el pijama. También, creo, de una asignatura que en principio iba a versar sobre los principios éticos y morales, y que al final la van a impartir curas,(esos seres anacrónicos)con ejemplos de Marcelino pan y vino... En fin, hablamos tanto que, a veces, es mejor que nos callemos.
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