viernes, septiembre 28, 2007

PUNTOS DE ENCUENTRO


Padres y madres de hijos que no consiguen entenderse y familias de acogida o guarda con las de origen tienen en los Puntos de Encuentro un lugar profesional donde empezar a restablecer la comunicación que han perdido o, en cualquier caso, facilitar que el tránsito de los hijos no esté sometido a la arbitrariedad de quienes los custodian o de quienes de forma intermitente los atienden.


El derecho natural de los fines de semana, vacaciones, estancias esporádicas, etc. obliga a muchas personas que dejaron de entenderse, y que guardan las diferencias con el más ácido rencor, a encontrarse ante sus hijos naturales o adoptivos, sea en la medida que sea, hijos a fin de cuentas, personas. Y en muchas ocasiones los temas pendientes entre los adultos con autoridad para educar simplemente por pertenecer a una edad, convierten estas citas para los menores en un infierno.


Disputas ante ellos, tensiones, problemas personales, celos, reproches económicos, necesidades afectivas, violencia psicológica y emocional, agresividad gestual, angustias personales, convierten el encuentro de los progenitores en la peor educación para quienes dependen de ellos y están adquiriendo modelos de comportamiento sentimental.


Hay muchos casos en que la mujer es protagonista de violencia de género. Las leyes en este país están siendo insistentes, pero la dinámica social no la para una ley –necesaria por otra parte-, ni la educación familiar se ha concienciado aún de que la igualdad es un derecho sustancial al ser humano. La conciencia individual menos.Tampoco algunas mujeres se han dado cuenta de que pueden contribuir a romper esa tónica de responsabilidad absoluta , y que de la misma forma que en una pareja se comprenden y respetan las diferencias si hay entendimiento, también con quines no son ya pareja, hombre o mujer, es nacesariA la misma precaución, incluso más intensamente. Tomar una postura en la vida no es situarte enfrente, como se nos quiere decir a veces o decidimos entenderlo.


Los hij@s son para empezar ell@s mism@s, y tienen derecho a una vida emocional limpia y respetuosa. Creerlos propios es, además de una aberración, una privación de derechos. Utilizarlos como arma arrojadiza, un acto de violencia de primer grado que lo único que perpetúa es el modelo sexista que se nos ha impuesto y contra el que venimos luchando.


Violencia es mucho más de eso que las cifras desgraciadamente arrojan a diario. Violencia es falta de respeto por la vida ajena, violencia es intentar imponer un modo de comportamiento distinto al propio, violencia es amenaza, coacción, intimidación o alarma sobre las actitudes del otro o la otra, es ofrecer un modelo de inquietud sobre las emociones, violencia es intentar poseer la vida ajena, la de los hijos o las hijas por ejemplo, y la de los que ya no consideramos nuestros también. Educar no es dar de comer y satisfacer los deseos y modelos propios como ajenos.


Necesitamos Puntos de Encuentros porque, en ocasiones, perdidas las referencias sobre qué somos y cómo nos situamos con respecto a la alteridad, solo profesionalmente se pueden canalizar las iras y desprecios con alevosía. Son necesarios porque somos capaces de trasladar con cólera el nefasto empeño de cambiar carencia o necesidad por poder y, sin ningún reparo, trasladarlo a la vida emocional de hijos e hijas, ex parejas o seres ocasionalmente responsables.


Bienvenidos esos Puntos de Encuentro y enhorabuena a quienes allí se sienten a salvo. De la decisión de acogerse a ellos depende el futuro de muchos seres indefensos.

14 comentarios:

Raquel dijo...

Efectivamente, Pilar, los hijos no son una propiedad, sino una responsabilidad. Tienen su propio carácter, una manera de ser que les es propia y que los padres debemos respetar.
Cuando una pareja con hijos se rompe, deberían tener presente que sus hijos son personas, que sienten, que la situación les afecta, y obrar en consecuencia de la mejor manera posible porque si bien la pareja deja de serlo, los hijos siguen siendo responsabilidad de ambos: sus necesidades básicas, su educación, su estabilidad emocional....
Afortunadamente hay parejas que saben llevar la ruptura de la mejor manera posible.
Por otro lado está también la estrategia de algunos niños en casos de parejas que llevan mal la ruptura: los niños se aprovechan de la situación para tiranizar a los padres;"si no me das lo que quiero, me voy con papá o mamá, que sí me lo da"...
Hay muchos puntos que analizar en estos casos.
Pero siempre es fundamental el respeto, tanto para la pareja que se rompe, como para los hijos.

Un beso, Pili

Azul dijo...

Los puntos de encuentro o casas de apoyo, son una base importante para restaurar vidas. Para unificar familias, y para volver a empezar.

Bikos!

Pilar M Clares dijo...

Un dato reciente en la comunidad de Madri: el 98% de los casos atendidos en los Puntos proceden de los Juzgados pues consideran que constituyen una actuación inmediata para solventar graves conflictos, es decir, no son los afectados normalmente quienes los solicitan, sino que lo dictamina un juez ante la conflictividad de las relaciones y la falta de entendimiento. Incumplir este dictamen incurre en lo penal. Apesar de todo, hay quienes lo hacen.

Hay casos en que los burlan, no sienten que sean ellos-as personas "adecuadas" a este tipo de situación, y es que. cuando no hay estabilidad emocional, ni un juez ni el sunsuncorda...

Lo suyo es la comunicación, lo suyo es pensar en los hijos-as, lo suyo es ser persona.

Besos Raquel y Azul.

Equinoxe dijo...

chess...

Anónimo dijo...

Gibram, tiene un poema precioso. Siempre lo he tenido presente. Me encanta, lo he regalado muchas veces.
Os lo dejo:

TUS HIJOS
Tus hijos no son tus hijos

son hijos e hijas de la vida

deseosa de sí misma.

No vienen de ti, sino a través de ti

y aunque estén contigo

no te pertenecen.

Puedes darles tu amor,

pero no tus pensamientos, pues,

ellos tienen sus propios pensamientos.

Puedes abrigar sus cuerpos,

pero no sus almas, porque ellas,

viven en la casa del mañana,

que no pueden visitar

ni siquiera en sueños.

Puedes esforzarte en ser como ellos,

pero no procures hacerlos semejantes a ti

porque la vida no retrocede,

ni se detiene en el ayer.

Tú eres el arco del cual, tus hijos

como flechas vivas son lanzados.

Deja que la inclinación

en tu mano de arquero

sea para la felicidad.

Educar, convivir en libertad y respeto con los hijos, es la asignatura más dificil que tenemos como adultos. Todo lo que ayude para ello, sobre todo cuando las situaciones se van de las manos, esta bien. Pero cuando se rompe el respeto...

Un abrazote grande!

Aloia dijo...

Cuánto se ha jugado y se juega en nombre de los hijos; he vivido situaciones cercanas muy desagradables. Se les hace tomar partido, se especula con ellos...; moneda de cambio de muchas situaciones incmprensibles por parte de quien menos se debería esperar dicho tráfico. Y sin bien es cierto que existen aquellos (hijos) que se aprovechan de la situación; creo yo, que no es más que una respuesta a las pautas recibidas. No digo que sea fácil, porque seguramente no lo sea; pero para mí no hay nada que justifique utilizar a los propios hijos.
Los puntos de encuentro, son una buena idea, sin duda, para mediar en aquellos casos en los que no existe acuerdo; pero por la experiencia de amigas psicólogas que han trabajado en dichos centros, existe el que nunca aparece(léase padre/madre) y el que aparece para montarla(léase de nuevo padre/madre)...hay gente que considera que nadie es "quien de decirle lo que tiene que hacer"...y es que casos hay tantos como personas....y gente hay mucha, personas menos, e "individuos"(léase el tono peyorativo)unos cuantos....
Mil biquiños!!

Karuna dijo...

Y así es Pilar, el menor es nuevo en todo, hay que llevarlo por el buen sendero desde un principio, fácil en la infancia es que se tuerza el camino del aprendizaje, pero importante que así no sea.

Un besote,
karuna

mariamc dijo...

me pregunto si los puntos de encuentro son sitios donde meramente se constata que los hijos pasan de una mano a otra en las mejores condiciones posibles dentro del desastre , si además se realiza algún tipo terapia, consejo,asesoramiento o formación a dichos padres, si es una medida que beneficia exclusivamente a los derechos de los padres ...no sé,sea lo que sea es la solución menos mala cuando todo está perdido. Lo peor de todo quizá sea el legado que dejamos a los hijos, el modelo de relación , la rabia e impotencia de no poder ponerte de acuerdo ni siquiera por un hijo en cuestiones tan importantes como su desarrollo afectivo y social.

Pilar M Clares dijo...

Celeste entre que son ellos y no lo son, están ahí pendientes de que les digas y les hagas, y eso crea un estar de dominio que da simplemente la edad y sobre todo la responsabilidad. Responsabilidad, sí, y sin querer -queriendo - olvidando, también lo poético esencial, abuso. No olvidré nunca que una alumna me ragaló un libro de Gibram. Palabras sabias, las suyas y las tuyas, como siempre. Besazos.

¿ Hasta dónde se nos va la cabeza? es verdad, Aloia, perdemos la perspectiva como humanos. Sería importante que se nos educara para pensar más en nosotros mismos, menos en esas soberbias de saberlo todo como si lo supiéramos. Animalidad. Pero es que en estos casos lo que hay en juego es muy importante, materia frágil. Pena de incomunicación, cierto. Tantos libros, Karuna , y es verdad, se escapa la realidad de lo más inmediato.

Tocas el tema esencial Cascadilla, qué gusto verte por aquí. Los padres son el origen del conflicto, hay una serie de especialistas según se dice en la información de las páginas de puntos de encuentros. Aloia habla de profesionales conocidos por ella. El tema es el legado, eso es lo peor. Un adulto se recupera con dificultades, la infancia es más débil, aunque se les enseñe a no llorar cuando se caen y esas cosas, o por eso. Pero la sociedad se autopretege de ella misma. Creamos las circunstancias y luego las paliamos con institutciones, necesarias, y poco autopiéticas, autoregeneradoras, medidas externas, algo es algo. Hay casos muy duros.

Muchos besos, a ti también, equinoxe (chesss)

¿alguien puede aportar alguna información más? Que siga el tema.

Anónimo dijo...

Nadie nos enseña ni nos prepara para ser padres. Tendría que existir una escuela, donde los adultos que quisieran tener hijos de modo responsable(esa es otra) fueran a aprender cómo y qué hacer para llevar a cabo esa tarea.

Tengo en mi trabajo un hombre de 45 años, su compañera, la madre de sus tres hijos, murió...jamás supo qué hacer desde entonces...cada vez a peor. Ahora, a dos de los chicos, los más pequeños, de 16 y 17 años, los ha entregado a la Junta de Castilla León, incapaz de controlarlos. Él, se justifica diciendo: "Yo trabajo...pero al faltar su madre..!"
No creáis que esto es un caso aislado o consecuencia de una escasa cultura, no, si preguntáis cuantos niños o jóvenes son entregados a la Junta para que se hagan cargo de su educación, os asombraríais.
Estamos en una sociedad donde los valores familiares, de pareja, de relación con los hijos, están cambiando tanto, en tan poco tiempo que por fuerza tiene que haber desajustes. Pasarán varias generaciones hasta que la familia vuelva a "asentarse".
Los cambios y la introducción de otros valores o formas de vivir la familia, nada tiene de malo,todo lo contrario...pero se necesita más tiempo.

Importantísimo el tema y el debate que genera, como siempre. Gracias Pilar, es un placer!

Aloia dijo...

Bueno, casos hubo siempre...ahora se dan a la Junta y antes....sabe dios a dónde, pero casos había muchos, así que desgracias familiares, calamidades...las hubo, las hay y las habrá toda la vida.
A cerca de la escuela de padres...interesante, pero difícil al mismo tiempo y triste, muy triste...pero sí, realista para muchos casos.
Me parece interesante resaltar el papel de la justicia en divorcios y sentencias de custodia...no es oro todo lo que reluce, y creo que debería revisarse. Creo también que falta igualdad de género a la hora de otrogar dichas custodias...
Este tema es muy amplio, demasiado diría yo para lo importante que sería poder simplificarlo.
Mil biquiños

Canichu, el espía del bar dijo...

te abro link

O de FLANEURETTE dijo...

espero que no suene a chiste...padres incompetentes deberian ser obligados a tomar drogas psicodelicas para de una vez por toda entender la dimension "humana" de sus vastagos, y dejarse de tanta ñoñeria egocentrica...

Pilar M Clares dijo...

Parece contradictorio eso de una escuela para padres, Celeste, -no digamos lo de las drogas, pelao-parece una nueva sofisticación del bienestar, parece que no hace falta ¿a míííí´?, vamos, con lo buena persona que soy...pero pensar no cuesta nada, primero en uno mismo, después proyectar. La insatisfacción propia genera sombras, y seguir las pautas recibidas es lo más fácil.

Estoy contigo, Aloia falta igualdad de géneros, en la justicia, en cualquier dirección y en todos los ámbitos que no están escritos. Las leyes hoy van por encima de la conciencia a veces. Sobran recursos, falta reflexión, pieso a veces.

merci, Canichuz, yo sigo tus noticias desde la barra, allí al fondo ¿me ves?

Besicos, personal sensible, seguimos.