jueves, mayo 01, 2008

DOCUMENTOS HISTÓRICOS (SIGLO XXI)

I
"POR LA PLATA BAILA EL MONO"(2004)
Liz K. Peñuela y Juana Ríos

Por la plata baila el mono es un video de creación de Liz K. Peñuela y Juana Ríos (2004, Universidad de Barcelona) En él las autoras cuestionan la débil argamasa con la que construimos, obligados simultáneamente a deconstruir, nuestra identidad en estos tiempos. Dos mujeres convertidas simbólicamente en estatuas humanas son las protagonistas de una nihilista historia que, reforzada con la interpretación llena de efectos de la propia Peñuela, resulta bastante irónica. La escisión entre origen y lugar elegido para vivir, la incomunicación por el empoderamiento de las lenguas, el trabajo y la ilegalidad, la familia, la raza, la maternidad, el miedo, son algunos de los temas que las autoras tratan. Por la plata baila el mono es una creación que os aconsejo. Desde aquí, mil gracias Liz, un honor tenerte aquí.


II
EL NEGRO
Rosa Montero
(El País, 17/5/2005)
Estamos en el comedor estudiantil de una universidad alemana. Una alumna rubia e inequívocamente germana adquiere su bandeja con el menú en el mostrador del autoservicio y luego se sienta en una mesa. Entonces advierte que ha olvidado los cubiertos y vuelve a levantarse para cogerlos. Al regresar, descubre con estupor que un chico negro, probablemente subsahariano por su aspecto, se ha sentado en su lugar y está comiendo de su bandeja.


De entrada, la muchacha se siente desconcertada y agredida; pero enseguida corrige su pensamiento y supone que el africano no está acostumbrado al sentido de la propiedad privada y de la intimidad del europeo, o incluso que quizá no disponga de dinero suficiente para pagarse la comida, aun siendo ésta barata para el elevado estándar de vida de nuestros ricos países. De modo que la chica decide sentarse frente al tipo y sonreírle amistosamente. A lo cual el africano contesta con otra blanca sonrisa. A continuación, la alemana comienza a comer de la bandeja intentando aparentar la mayor normalidad y compartiéndola con exquisita generosidad y cortesía con el chico negro.

Y así, él se toma la ensalada, ella apura la sopa, ambos pinchan paritariamente del mismo plato de estofado hasta acabarlo y uno da cuenta del yogur y la otra de la pieza de fruta. Todo ello trufado de múltiples sonrisas educadas, tímidas por parte del muchacho, suavemente alentadoras y comprensivas por parte de ella. Acabado el almuerzo, la alemana se levanta en busca de un café. Y entonces descubre, en la mesa vecina detrás de ella, su propio abrigo colocado sobre el respaldo de una silla y una bandeja de comida intacta.


Dedico esta historia deliciosa, que además es auténtica, a todos aquellos españoles que, en el fondo, recelan de los inmigrantes y les consideran individuos inferiores. A todas esas personas que, aun bienintencionadas, les observan con condescendencia y paternalismo. Será mejor que nos libremos de los prejuicios o corremos el riesgo de hacer el mismo ridículo que la pobre alemana, que creía ser el colmo de la civilización mientras el africano, él sí inmensamente educado, la dejaba comer de su bandeja y tal vez pensaba: "Pero qué chiflados están los europeos".

6 comentarios:

Aloia dijo...

Has vuelto!!!!!!!!!!!
Los robots se han rendido!!!!!
Viva!!!Viva!!!!Viva!!!

Negro...me impresionó cuando lo vi hace años...y hoy me has hecho recordar la sensación que tuve al verlo...escalofriante, porque es duro, sí es duro verse reconocida en la "estúpida buenaintención" de la alemana...sí, confieso, yo también he pecado en alguna ocasión...y desde Negro me abrió los ojos de algunas cosas de las que no era totalmente consciente.

Por la plata baila el mono, no lo concía...interesante, aunque...bueno, que me deja más indiferente la realización que el otro, el trasfondo, evidentemente no.

Mil biquiños!!!

Pilar M Clares dijo...

Ya está, sí, Aloia, se acongojaron con tus contudentes palabras --¡sr. blogger, jajajajaj, que te la cargas, qué estupenda eres-- qué bueno, y creo que no me soportaron escribiendo a todas horas para que me abrieran de nuevo el grifo. Todo volvió a la normalidad. Guardaremos plan de ataque para otro frente, camarada.

EL texto de Rosa Montero apunta al paternalismo hacia lo extraño, otra forma de alejamiento, y otra forma de miedo. Año del DIálogo Intercultural, pues eso, que sea verdad.

Besicos, guapa, lo que vales, niña

Isabel Barceló Chico dijo...

No dispongo de mucho tiempo ahora para ver el vídeo, pero volveré porque el principio me ha parecido muy interesante. En cuanto a la historia de la alemana y el joven negro, está muy bien. La conocía en otra versión, pero me parece significativa y muy aleccionadora para bajarnos los humos... Besos, querida amiga, y feliz día del trabajador.

Anónimo dijo...

Por la plata bailamos todos los simios, pero no valida para pisar los pies.
Besos

Pilar M Clares dijo...

Un día cualquiera, como es hoy, en la prensa:

Los Gobiernos español y francés tendrán redactado "en cuestión de días" un acuerdo global para el control migratorio, según aseguró ayer el secretario de Estado para las relaciones con la Unión Europea, Diego López Garrido....

... alcanzar un pacto global sobre la regulación del flujo de inmigrantes y las medidas encaminadas al control de la "inmigración irregular"

...Para el presidente francés, Nicolas Sarkozy, las políticas migratorias serán prioritarias mientras ejerza la presidencia de turno de la Unión Europea, durante el segundo semestre de este año. También el presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez, quiere impulsar la lucha contra la inmigración irregular cuando le corresponda la presidencia de la Unión Europea, en 2010.

lucha contra la inmigración ... qué palabras se gastan.

Y luego los mismos, en la UE: ¡viva el diálogo intercultural!!
en vez de decirlo claro: ¡viva la pasta y el trabajo en negro, y la natalidad para el continente viejo, y que se vengan para acá, que llevamos nuestras inversiones para allá, etc. viva!

AY.
Besos Isabel y Pedro

@slz_ dijo...

me he reido genuinamente con la historia del jodido negro y la sufrida alemana. adios a los prejuicios.